jueves, 3 de junio de 2010

El viento y el sol modelan Marte

Los dos últimos estudios sobre Marte han resuelto 40 años de misterio en torno a los casquetes polares del planeta rojo. El descubrimiento de una serie de hoyos en espiral en la superficie y de un Chasma Boreal, un gran cañón que corta el polo norte del planeta, evidencian un cambio climático desconocido hasta el momento.

Según la investigación llevada a cabo por un equipo de la Universidad de Texas (EEUU) encabezado por Isaac Smith y John Holt, ambas formaciones se atribuyen a la acción conjunta del viento y el sol.

Hasta ahora se habían apuntado muchas hipótesis sobre cuál sería la composición del planeta rojo, pero estaban limitadas a la observación de la superficie. En esta ocasión los científicos han utilizado la información recopilada por dos radares en órbita capaces de averiguar la composición de las capas de depósitos más profundas, para descifrar así el modelo más probable.

Además, el estudio ha revelado que la creación de estos hoyos se debe a la combinación de materiales depositados y a la erosión producida por el viento y el sol. Una vez formados, estos hoyos se desplazaron hacia los polos y se elevaron unos 600 metros de altura a lo largo de un periodo de dos millones y medio de años.

En un segundo estudio, el mismo equipo utilizó la información del Orbitador de Reconocimiento de Marte ('Mars Reconnaissance Orbiter') para demostrar que la creación del Chasma Boreal se debió -más que a cataclismos, desplazamientos de hielo o fuertes erosiones- a procesos de deposición a gran escala y a largo plazo.

Con los datos obtenidos por radar, los científicos son capaces de diseccionar la capa de hielo en varias partes, como si fuera una cebolla.

A partir de la información recabada, algunos investigadores sugieren que estas formaciones podrían haber surgido por el calor volcánico del planeta que derritió las capas más profundas del bloque de hielo. Otros, sin embargo, apuntan a que estas formaciones, incluidas las depresiones espirales, surgieron a partir de fuertes vientos polares, llamados 'katabatics', que tallaron el cañón o esas formas en el hielo.

martes, 1 de junio de 2010

Fósiles de plantas de hace 100 millones de años

La Universidad de Zaragoza (UZ) ha colaborado con las universidades de Vigo, Barcelona y Lyon en el descubrimiento de una planta del Cretácico inferior de la familia de los nenúfares llamada 'Ploufolia cerciforme' de más de 100 millones de años de antigüedad. El hallazgo recibe su nombre en homenaje a la localidad turolense de Plou, donde fueron encontrados los restos fósiles, y ha sido difundido en la publicación científica 'Review of Paleobotany and Palynology'.

Este descubrimiento ha sido posible gracias a las investigaciones de los profesores doctorandos Luis Miguel Sender, Uxue Villanueva Amadoz y del profesor titular de Paleobotánica, Javier Ferrer.

Según indicó Luis Miguel Sender, conservador del Museo Paleontológico de Zaragoza, en declaraciones a Europa Press, el hallazgo supone la demostración de que ya existían plantas angiospermas (con flores) relacionadas con los nenúfares en el Cretácico, hace 135 millones de años. 

El yacimiento en Plou lleva estudiándose desde el año 2004, aunque la investigación de plantas del Cretácico en Teruel se remonta a los años noventa, explicó Sender. Sólo unos pocos lugares en el mundo poseen yacimientos que conserven fósiles de angiospermas primitivas. Los yacimientos de Paleobotánica encontrados en Teruel "se encuentran a la altura de los de Estados Unidos, Rusia o Centroamérica y deben sus excepcionales condiciones de conservación a la buena exposición de los materiales sobre el terreno que se da en esa provincia aragonesa".

Las hojas de 'Ploufolia cerciforme', junto a otras plantas fósiles provenientes de yacimientos de la provincia de Teruel, pueden admirarse en la muestra 'Plantas fósiles del Cretácico aragonés', ubicada en la Sala Lucas Mallada del Museo Paleontológico de la Universidad de Zaragoza, en la primera planta de la Facultad de Geológicas. 

jueves, 27 de mayo de 2010

Nectocaris pteryx, un enigmático fósil antepasado del calamar

Un animal que vivió hace 500 millones de años y no fue descubierto hasta hace un siglo en el yacimiento de Burgess Shale (Canadá) ha sido ahora identificado como uno de los más primitivos moluscos cefalópodos, antepasado del calamar, el pulpo y la sepia. El Nectocaris pteryx es un carnívoro que fue considerado como una gamba con cola cuando sólo se conocía un ejemplar, y que no fue descrito hasta 1976. Sin embargo, hace tres décadas se reabrió este tesoro paleontológico, que guarda las huellas de la fauna marina de cuerpo blando surgida en la explosión del Cámbrico, y los investigadores han dispuesto de otros 91 especímenes para estudiar y han concluido que es un molusco. Así lo publican los paleontólogos canadienses Jean-Bernard Caron y Martin R. Smith en Nature.

Este primitivo animal vivió hace hace 500 millones de años, en el periodo del Cámbrico medio y durante décadas el único especimen que se conocía fue un misterio para la ciencia.

La investigación de Jean-Bernard Caron y Martin R. Smith, ambos de la Universidad de Toronto (Canadá), lograron identificar la especie entre la inmensa colección de criaturas encontradas en el famoso yacimiento de Burgess Shale, en el que se conservan fósiles de organismos de cuerpo blando que evolucionaron en un periodo de explosión de la vida en el planeta.

Durante los últimos 30 años, conservador jefe de las colecciones del Museo Real de Ontario, Desmond Collins, ahora jubilado, se dedicó a recoger hasta 91 nuevos fósiles del 'Nectocaris' en un lugar llamado Walcott Quarry.

Estos nuevos restos, que tienen entre dos y cinco centímetros de largo, permitieron a Caron y Smith descubrir que se trataba de uno de los primeros cefalópodos, retrasando su origen al menos 30 millones de años.

El 'Nectocaris' tiene un cuerpo aplatastado con forma de cometa, con dos enormes ojos y dos largos tentáculos que, según los investigadores, le ayudaban a buscar y comerse a sus víctimas. En 'Nature', donde publican su trabajo esta semana, sugieren que nadaba gracias a sus dos grandes aletas laterales y que tenía en la cabeza una especie de sifón con forma de embudo para acelerarse durante su locomoción.

Pero una de las características más llamativas es que no tenían caparazón mineralizado, lo que supone que el primitivo ancestro de este grupo era una criatura similar a los modernos nautilus o a las extintas amonitas.

Smith recuerda que durante mucho tiempo se pensó que los cefalópodos evolucionaron en el Cámbrico tardío, después de que aparecieran los caparazones que les permitían flotar. Sin embargo, en este caso se observa que podían nadar sin ayuda de estos caparazones, que habrían aparecido más tarde.

domingo, 23 de mayo de 2010

Nueva visión de M83, una galaxia espiral clásica

ESO ha dado a conocer uno de los retratos más precisos y detallados obtenidos hasta ahora de la galaxia cercana Messier 83. La imagen, captada con el instrumento HAWK-I del Very Large Telescope (VLT) de ESO en el Observatorio Paranal (Chile), muestra a la galaxia en luz infrarroja y demuestra el increíble poder de esta cámara.

La galaxia Messier 83 está ubicada a unos 15 millones de años-luz de distancia, en la constelación de Hydra. Su extensión alcanza más de 40 mil años-luz, sólo un 40 por ciento del tamaño de la Vía Láctea, pero en muchos sentidos es similar a nuestro hogar galáctico, tanto por su forma espiral como por la presencia de una franja de estrellas que atraviesa su centro. 

Messier 83 es famosa entre los astrónomos por su gran número de supernovas: las vastas explosiones con que mueren algunas estrellas. En el siglo pasado, seis supernovas fueron observadas en Messier 83, un número récord que ha sido alcanzado sólo por una galaxia más. Incluso sin supernovas, Messier 83 es una de las galaxias cercanas más brillantes que se pueden ver usando binoculares.

Messier 83 ha sido observada en la parte infrarroja del espectro usando HAWK-I, una poderosa cámara instalada en el Very Large Telescope (VLT) de ESO. Al ser observado en luz infrarroja, la mayor parte del polvo que oscurece a Messier 83 se vuelve transparente. El gas brillante alrededor de estrellas jóvenes y calientes, presente en los brazos espirales, también resalta menos en las imágenes infrarrojas. Como resultado, se puede observar mucho mejor la estructura de la galaxia, así como las vastas hordas de estrellas que la constituyen. 

Para los astrónomos que buscan cúmulos de estrellas jóvenes es importante contar con una visión clara, especialmente de aquellas estrellas escondidas en áreas de la galaxia donde hay polvo. Estudiar cada cúmulo de estrellas era una de las principales metas científicas de estas observaciones. Al comparar con imágenes previas, la aguda visión de HAWK-I revela muchas más estrellas en el interior de la galaxia.

sábado, 22 de mayo de 2010

El Hubble detecta una estrella que devora un planeta

Wasp-12 es una estrella normal, parecida al Sol, situada a unos 600 años luz de la Tierra, en la constelación del Auriga. A su alrededor gira un planeta que se descubrió en 2008, su masa es superior en un 40% a la de Júpiter y está tan cerca de su astro que cumple una órbita completa (un año) en poco más de un día terrestre. El planeta se llama Wasp-12b y dejará de existir dentro de 10 millones de años, el tiempo que la estrella tardará en devorarlo completamente. El proceso ya está en marcha, y el telescopio espacial Hubble lo ha detectado.

El proceso por el que un cuerpo estelar va robando materia de otro es conocido, pero hasta ahora se había visto sólo en parejas de estrellas (sistemas binarios), nunca tan claramente entre una estrella y un planeta a su alrededor. Sin embargo se había predicho algo así: hace sólo tres meses un científico de la Universidad de Pekín, Shu-lin Li, publicó en la revista Nature un trabajo en el que calculaba que la superficie de un planeta podría resultar distorsionada por la fuerza de gravedad de su estrella y que las fuerzas de marea calentarían su interior hasta el punto de provocar la expansión de su atmósfera. Esto es justo lo que ha descubierto ahora el Hubble, según informa el Instituto Científico del Telescopio Espacial. La atmósfera de Wasp-12b ha crecido hasta tres veces el radio de Júpiter y está trasfiriéndose a la estrella. El hallazgo se detalla en la revista Astrophysical Journal Letters

Al existencia del Wasp-12 se descubrió en un rastreo automático que mide ligeras caídas periódicas de la luminosidad de estrellas, lo que puede indicar que un planeta en órbita se cruza por delante en la línea de visión desde la Tierra. Es lo que se llama un tránsito, una de las técnicas ahora habituales para descubrir planetas extrasolares. Ahora el Hubble se ha ocupado de este caso, apuntando su espectrógrafo Cos, de alta sensibilidad en ultravioleta, y ha sido capaz de medir el ligero oscurecimiento de la estrella en el tránsito obteniendo información muy valiosa.

El análisis de la luz ha permitido a los astrónomos, dirigidos por Carole Haswell (Open University, Reino Unido) identificar las firmas de elementos como el aluminio, el estaño y el manganeso especialmente pronunciadas durante el tránsito, lo que indica que están presentes en la atmósfera del planeta y que está ya muy caliente y extendida. Además, gracias al Cos, los astrónomos han logrado medir con alta precisión cuánta luz de la estrella resulta bloqueada cuando pasa el planeta por delante y han calculado el radio de este último. El resultado es que su exosfera está ya mucho más extendida de lo que correspondería a un planeta con una masa igual a 1,4 veces la de Júpiter. El radio de Wasp-12b supera la frontera gravitacional más allá de la cual la pérdida de materia de la atmósfera es irreversible. A partir de ahí es cuestión de tiempo, 10 millones de años, para que el astro se trague completamente el planeta.

sábado, 15 de mayo de 2010

Un sistema para calcular con precisión la edad de las estrellas

Un equipo de científicos, algunos de ellos de varios centros de investigación españoles, ha encontrado la clave para datar la edad de las estrellas enanas blancas del cúmulo galáctico NGC 6791, que ahora podrán ser usadas como "cronómetros fiables" para determinar el nacimiento de otros sistemas.

La investigación ha demostrado que la edad de las estrellas blancas estudiadas -situadas a una distancia de 13.300 millones de años/luz- es de 8.000 millones de años y no de 6.000 millones, como se creía, una diferencia hallada por medio del análisis de la sedimentación de los elementos químicos más pesados y la cristalización de materiales del interior de la estrella.

Estos procesos han permitido calcular con precisión la edad, gracias a la comparación entre los cálculos hechos por los investigadores, con las medidas del cúmulo realizadas con imágenes del telescopio espacial Hubble, y que han comprobado que coinciden, según explicó Enrique García-Berro, investigador del Departamento de Física aplicada de la UPC y director de esta investigación que se publica el jueves en 'Nature'.

La tesis doctoral de García-Berro de 1987 ya apuntaba una hipótesis, en la que ha profundizado este trabajo internacional, de que las enanas blancas pueden servir para fijar la edad de la Vía Láctea, o de agrupaciones de estrellas que hubieran nacido más o menos al mismo tiempo, una especulación que ahora se ha confirmado con unos modelos detallados de estos procesos.

"Este sistema es como una regla, permite calibrar mejor la edad, y esto se puede aplicar, por ejemplo, a la edad de nuestra galaxia -a la que ahora se otorga una antigüedad del orden de unos 10.000 millones de años- y calcular las edades de otros cúmulos", explica García-Berro, que apunta que el resto de galaxias están tan lejos que no se pueden ver las enanas blancas con los medios actuales.

La mayoría de las enanas blancas, formadas por un núcleo de carbono y oxígeno y que son consideradas como residuos -restos compactos de estrellas, fruto de la evolución estelar-, tienen en el momento de su formación niveles de temperatura y brillo muy alto, pero al no tener otra fuente de energía que la reserva térmica se enfrían gradualmente y disminuyen su luminosidad hasta que dejan de irradiar.

La enanas blancas han servido a la ciencia para estimar, desde el punto de vista teórico, la edad de la galaxia y otros sistemas de estrellas, aunque la poca concreción de las hipótesis que se barajaban era muy grande, ya que no se podía probar los fenómenos de densidad y temperatura producidos en el interior de las estrellas, imposibles de reproducir en laboratorio.

Esta investigación ha demostrado mediante la simulación toda la evolución de las enanas blancas. Se han incluido los dos procesos físicos que tienen lugar en el núcleo de estas estrellas y que nunca se había tenido en cuenta, en concreto la sedimentación del neón y la separación de fases del carbono y el oxígeno durante la cristalización, que sucede a temperaturas más bajas.

En estas dos etapas de la evolución, la estrella libera energía gravitacional y el enfriamiento se ralentiza. Como las enanas blancas más débiles del cúmulo son también las más rojas y frías, si se dispone de buenos modelos de medición del enfriamiento se puede calcular la edad del cúmulo.

Los expertos han calculado los colores y el brillo de las enanas blancas del cúmulo y han podido comprobar que en las más débiles, los efectos de estos procesos físicos retardan el enfriamiento de forma que la edad del cúmulo y de las enanas blancas coinciden.

Los resultados de esta investigación abren el camino "para profundizar en el conocimiento del universo", explican sus autores, entre los que hay también científicos del Instituto de Estudios Espaciales de Cataluña, del Instituto de Ciencias del Espacio del CSIC, la Universidad Nacional de la Plata (Argentina) y la Liverpool John Moores University.

"Ahora hay que aplicar esta investigación a otros sistemas estelares y ver que efectivamente sirve para predecir las edades de forma correcta, o para ver si hay fuentes adicionales de energía en el interior de estrellas, o utilizarla para conocer si la constante de la gravitación varía con el tiempo, un abanico de posibilidades", concluye García-Barro.

viernes, 14 de mayo de 2010

La NASA descubre surcos de hielo con apariencia luminosa en Titán

La sonda de la NASA Cassini-Huygens -un proyecto conjunto de la NASA, la ESA y la ASI- ha descubierto que la región de Xanadu, en la luna de Saturno Titán, se encuentra pavimentada con millares de bolas de hielo de apariencia luminosa ya que han sido pulidas por las tormentas que se producen en la zona.

Científicos de la NASA han explicado que el terreno está surcado por numerosos canales en los que se encuentran esferas 'luminosas' de varios centímetros que pueden alcanzar hasta los dos metros de diámetro, detalla la agencia estadounidense.

Estas esferas -localizadas por la sonda Huygens de la Agencia Espacial Europea (ESA, por sus siglas en inglés), cerca de la zona fronteriza entre Adiri y las regiones de Shangri-la- proceden probablemente de un lecho de rocas ubicadas en el terreno más alto de Xanadu.

En principio, las esferas están formadas, entre otros elementos, por amoníaco, capaz de reflejar la luz exterior. En cuanto a su formación, los expertos creen que son el resultado del choque de la arena contra las rocas de metano. Además, las bajas temperaturas que se registran en Titán contribuyen a la deformación y fractura de las mismas.

En palabras de uno de los expertos del Laboratorio de Propulsión de la NASA en California (EEUU), Alice Le Gall, "las esferas tienen la apariencia de las rocas pulidas que se encuentran en los ríos de la Tierra, donde el agua allana sus bordes".

Los científicos creen que, al igual que las lluvias torrenciales que hay en la Tierra, en Titán se produjeron precipitaciones de metano líquido y etanol que erosionaron la superficie del satélite provocando una serie de canales 'brillantes' en el sur de Xanadu. Asimismo, equipararon algunos de los sucesos atmosféricos que se producen en Titán con los de la Tierra ya que han sido capaces de registrar diferentes estaciones.

miércoles, 28 de abril de 2010

Un meteorito revela los misterios de la evolución geológica de Marte



Un nuevo análisis de un meteorito que cayó en los hielos antárticos procedente de Marte ha revelado que data de un periodo en que ese planeta tuvo un campo magnético y agua, unas condiciones favorables para la vida, según un estudio divulgado por la revista Science.

La roca marciana identificada como ALH84001 fue descubierta en 1984 y su antigüedad es de 4.091 millones de años, 400 millones menos de lo que inicialmente se pensaba, por lo que probablemente no es una pieza de la corteza primigenia de Marte, según los análisis realizados por un grupo científico de la Universidad de Houston encabezado por el profesor de geociencias Thomas Lapen.

La edad del meteorito sugiere que la formación de corteza a partir de magma se llevó a cabo en Marte durante gran parte de la historia del planeta.

Los científicos concluyeron que la roca se formó en un momento en que Marte era un lugar muy húmedo y el planeta tenía un campo magnético y condiciones favorables para el desarrollo de una forma de vida, según el estudio.

Anteriormente se creía que el meteorito, cuya edad había sido estimada en alrededor de 4.510 millones de años, era un remanente de la corteza marciana primordial que se formó durante la solidificación de un antiguo océano de magma.

ALH84001 es 2.500 millones de años más antiguo que cualquier otro meteorito caído sobre la superficie de la Tierra procedente de Marte, y es el único con el que cuentan los científicos de los primeros tiempos de la evolución del planeta.

Los datos que se obtengan del meteorito ayudarán a comprender por analogía los procesos iniciales de la evolución de la Tierra, agrega el estudio.

"Esta investigación nos ayuda a refinar la historia de Marte y tiene enormes ramificaciones para el conocimiento sobre los procesos volcánicos de Marte y las fuentes del magma que creó los más grandes volcanes del sistema solar", señaló Lapen.

Según el científico, los datos también ayudarán a definir los modelos sobre la formación planetaria y la evolución de todo el sistema solar.

Lapen indicó que durante el análisis se estudiaron las composiciones isotópicas de los minerales del meteorito con un método relativamente nuevo para determinar la edad y las fuentes del magma que produjo las rocas. "Descubrimos pruebas de que los sistemas volcánicos de Marte estuvieron en actividad durante más de 4.000 millones de años", manifestó.

miércoles, 21 de abril de 2010

Intensa actividad volcánica en Venus

La sonda Venus Express de la Agencia Espacial Europea (ESA) ha revelado una intensa actividad volcánica en ese planeta, según un estudio de un grupo internacional de científicos divulgado hoy por la revista Science.

La actividad de esos volcanes puede revelar las claves sobre la forma en que se ha estructurado la superficie de Venus durante los últimos miles de millones de año.

También, según el informe, ayudará a comprender la evolución del clima y de la masa del más cercano vecino de la Tierra.

Venus y la Tierra son similares en tamaño y en producción interna de calor, pero ambos han tenido una evolución geológica totalmente diferente. Mientras que el primero es un planeta candente, el segundo se ha mantenido relativamente frío.

Venus Express entró en la órbita de ese cuerpo celeste en abril de 2006 tras ser lanzada a bordo de un cohete Soyuz-Fregat en noviembre de 2005 con la misión específica de estudiar en gran detalle la atmósfera del astro mediante su Espectrómetro de Imagen Infrarroja y Visible (Virtis, por sus siglas en inglés).

Suzanne Smrekar, científica del Laboratorio de Propulsión a Chorro de la NASA, explicó que la investigación se ha centrado en tres puntos en el hemisferio sur de la superficie venusiana de los cuales surgen columnas de rocas derretidas por las altísimas temperaturas del planeta.

De acuerdo con los científicos, de esos tres puntos surgen ríos de lava que emiten una cantidad anormalmente enorme de calor en comparación con los lugares que les rodean.

Eso significa que se trata de volcanes recientemente activos cuyos ríos de lava tienen una antigüedad de menos 2,5 millones de años.

En el estudio también participaron investigadores italianos, franceses y alemanes.

martes, 20 de abril de 2010

Ancestro de la cucaracha en 3D

Vivió hace 300 millones de años y es pariente de las actuales cucarachas. Científicos británicos han reconstruido con enorme detalle las características de este insecto por medio de una maqueta virtual tridimensional. El estudio se publica esta semana en 'Biology Letters'.

El ejemplar pertenece a la especie 'Archimylacris eggintoni', que es una antecesora de las actuales cucarachas y termitas. Los científicos creen que vivió durante el llamado periodo Carbonífero (359-299 millones de años). Los paleontólogos han hallado en todo el mundo multitud de fósiles de esta especie y de otros parientes de esta época.

Los fósiles de estas criaturas medían entre 2 y 9 centímetros de largo y aproximadamente 4 centímetros de ancho.

"Gracias al proceso de recreación en 3D podemos ver cómo la 'Archimylacris eggintoni' adaptaba sus miembros a todas las superficies y era muy ágil tanto en el aire como en la tierra", explica Russell Garwood, principal autor del estudio.

Los investigadores crearon las imágenes utilizando un escáner del Museo de Historia Natural de Londres, que les permitió tomar imágenes en rayos x del fósil y transferir las imágenes a un modelo en tres dimensiones, creando un 'fósil virtual' de la criatura por medio de un software específico.

lunes, 12 de abril de 2010

La glaciación africana de hace 444 millones de años alcanzó Europa

La glaciación ocurrida hace 444 millones de años en el polo sur del antiguo macrocontinente de Gondwana, que abarcaba África, Sudamérica, la Antártida, India, Australia y parte de China, llegó al continente europeo, según una investigación realizada en las obras de la variante ferroviaria de Pajares.

Las obras permitieron descubrir varios depósitos glaciomarinos desconocidos en la cordillera cantábrica por un equipo de investigados liderado por el geólogo del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) Juan Carlos Gutiérrez-Marco.

Según ha informado hoy el CSIC, se trata de la primera evidencia científica de la existencia de valles glaciares en León y Asturias, contemporáneos a la gran glaciación con la que culmina el periodo ordovícico que originó una extinción en masa mayor aún que la que hace 65 millones de años acabó con los dinosaurios y los ammonites,

"Tras los hallazgos del túnel, fuimos a la montaña para explorar con otra mirada lo que los mapas y muchos geólogos descartaban, y allí estaba lo que buscábamos: rocas glaciares del Ordovícico Superior en Telledo, Asturias, y al sur del puerto de Pajares, en Casares de Arbás y Pontedo, en León", señala Gutiérrez-Marco.

Estos antiguos valles glaciares, de hasta 250 metros de profundidad y de uno a tres kilómetros de ancho, se encuentran rellenos por areniscas y pizarras con cantos, recubiertos por lo general por una capa de cuarcita depositada en ambientes marinos muy poco profundos al acabar la glaciación.

Los investigadores hallaron además pruebas de que esos antiguos relieves fueron valles-túneles de forma excavados por las aguas del deshielo que drenaban por debajo del casquete glaciar.

Así, según Gutiérrez-Marco, el hallazgo, que acaba de publicarse en la revista Geology, demuestra que el proceso de incisión erosiva, que dio lugar a los valles "tuvo que realizarse forzosamente bajo una espesa capa de hielo acumulado por encima".

Además, los autores de la investigación plantean que la Península Ibérica tuvo que estar físicamente conectada con las áreas emergidas del macrocontinente de Gondwana durante la glaciación ordovícica.

En algunos estudios previos, Gutiérrez-Marco había defendido que los territorios ibéricos se situaban en esa época a la altura de Libia y Egipto en vez de frente a la actual costa atlántica de Marruecos y el Sáhara Occidental, como afirman autores anglosajones.

Según este investigador, este hallazgo refuerza su criterio sobre la localización de la Península Ibérica en el periodo ordovícico cuyos argumentos paleogeográficos se basaban en la recuperación en España y Portugal de fósiles de dicha época similares a los localizados en Libia, el noreste de Argelia y la Península Arábiga.

Este estudio, en el que han participado geólogos de las constructoras del túnel de Pajares y el paleoglaciólogo de la Universidad de Estrasburgo Jean-François Ghienne, tiene "repercusión mundial" y puede tener implicaciones en el marco de la prospección petrolífera en el norte de África y Arabia.

Según Gutiérrez-Marco, las rocas que almacenan depósitos de crudo y gas son, precisamente, las areniscas que rellenan sucesivos ciclos de paleovalles excavados a finales del periodo ordovícico.

viernes, 9 de abril de 2010

El anfibio que surgió por un cambio climático hace 300 millones de años

Un cambio climático que se produjo hace 300 millones de años favoreció la aparición y expansión de un anfibio terrestre carnívoro que ha sido bautizado como 'Fedexia striegeli', según una investigación que esta semana publica 'Annals of Carnegie Museum'.

El animal ha sido descubierto en Pensilvania (EEUU) y forma parte de un grupo de anfibios ya extintos llamados 'Trematopidae', que habitaron la Tierra 70 millones de años antes que los primeros dinosaurios.

'Fedexia striegeli' es uno de los escasos anfibios relativamente grandes cuyas características muestran que eran predominantemente terrestres en una época geológica tan temprana.

Los autores de esta investigación subrayan que el yacimiento donde se encontró el fósil es 20 millones de años más antiguo que otras zonas arqueológicas en las que han sido hallado animales emparentados con 'Fedexia striegeli', lo que sugiere que la expansión y diversificación de este grupo de animales se dio antes de que lo que hasta ahora se pensaba.

Excelente estado de conservación

Un grupo de paleontólogos del Museo Carnegie de Historia Natural encontró el cráneo en 2004, cerca del aeropuerto internacional de Pittsburgh. El fósil, que mide unos 12 centímetros, se encuentra en un excelente estado de conservación, hasta el punto de que se conserva en tres dimensiones pues no fue aplastado por las rocas, algo poco habitual.

A diferencia de otros anfibios que apenas salían del agua, la nueva especie descubierta pasaba la mayor parte del tiempo en tierra y sólo volvía a mojarse para poner sus huevos. Su adaptación habría sido posible gracias a una tendencia global que paulatinamente produjo un clima más seco y caluroso.

Según este estudio, hace 300 millones de años el clima de la Tierra estaba en periodo de transición. Los grandes glaciares del Polo Sur producían rápidos cambios en el clima global y en el oeste de la zona que hoy es Pensilvania se daban lluvias torrenciales. En ese contexto, comenzaron a proliferar los pantanos y con ellos, los anfibios, que necesitan un hábitat húmedo para sobrevivir.

Sin embargo, el agua se fue congelando gradualmente en los polos, con lo que el nivel del mar descendió. Asimismo, grandes regiones de la Tierra fueron volviéndose más cálidas y numerosos lagos y pantanos se secaron, lo que provocó la extinción de numerosas especies de plantas. En esa época fue cuando los anfibios tuvieron que adaptarse y pasar de ser predominantemente acuáticos a terrestres. La población de vertegrados que ya habían empezado a vivir en los dos ambientes -entre los que se encuentran parientes del 'Fedexia striegeli'- creció y se expandió mucho más rápido que aquellos que seguían dependiendo de un hábitat frío y húmedo.

La gran cantidad de fósiles de anfibios de los 'Trematopidae' hallados sugiere que el cambio climático fue un factor decisivo en la diversificación de anfibios terrestres. Y el hallazgo de 'Fedexia striegeli' 20 millones de años antes es un indicador de lo que iba a ocurrir.

Los investigadores apuntan, sin embargo, que estos animales no aparecieron de repente. Probablemente existieron millones de años antes en zonas en las que no se han conservado sus fósiles. Sin embargo, la transición hacia un clima más seco y caluroso provocó la dispersión masiva de vertebrados terrestres hacia zonas de costa.

jueves, 8 de abril de 2010

Uno de los fósiles más extraños del mundo

Científicos han descubierto en pleno centro de Ottawa, la capital de Canadá, uno de los fósiles más raros del mundo, el esqueleto complejo de un plumulitid machaeridian, una extraña criatura de 450 millones de años que se asemeja a un gusano de armadura plateada. Se trata de un gusano anélido, el grupo que incluye a las lombrices de tierra y a las sanguijuelas, hoy en día extendido desde lo más profundo de mar a los jardines de los vecindarios. El descubrimiento puede suponer una clave importante para conocer cómo evolucionaron estos organismos tan primitivos.

«Estos nuevos e importantes fósiles se descubren generalmente en zonas alejadas o poco estudiadas del planeta, lo que requiere viajes difíciles y un poco de aventura para llegar a ellos», explica Jakob Vinther, investigador de la Universidad de Yale y autor principal del estudio. Sin embargo, este raro especímen «¡fue encontrado en un lugar que tiene una dirección en el mapa!»: Plumulites canadensis, Albert Street, Ottawa, Canadá K1P1A4, por si alguien quiere enviarle una postal.

La existencia de los extraños restos llegó a oídos de los científicos a través de un coleccionista de fósiles aficionado, que los encontró en un pequeño bloque durante la excavación de un edificio. Los investigadoes se dieron cuenta muy pronto de que no se trataba de un trilobite común, una clase de artrópodos extintos, pero no pudieron confirmarlo hasta pasado un tiempo, cuando los investigadores encontraron fósiles similares en localidades remotas de las montañas de Marruecos.

El plumulitid machaeridian tiene de unas fuertes extremedidades para caminar, dispuestas a modo de cerdas, y un conjunto de placas mineralizadas sobre el dorso. Estas placas eran rígidas, pero se podían mover una respecto a otra proporcionando al animal una armadura de protección muy parecida a la armadura de metal flexible inventada por el ser humano 450 millones de años más tarde. Posiblemente, esta característica le ayudó a sobrevivir. 

lunes, 5 de abril de 2010

El terremoto de Chile redujo la duración del día

El terremoto de 8,8 grados en la escala de Richter ocurrido el sábado en Chile, que ha dejado al menos 700 muertos, redujo muy levemente la duración del día y desplazó el eje de la Tierra en ocho centímetros, según los datos de la agencia espacial estadounidense (NASA).

En un artículo publicado en la revista 'Business Week', el geofísico de laboratorio de la NASA en Pasadena, California, Richard Gross, indicó que los terremotos pueden desplazar hasta cientos de kilómetros de rocas en espacios muy reducidos, lo cual modifica la distribución de la masa en el planeta y afecta a la rotación de la Tierra.

Este pequeño cambio queda englobado "en cambios más grandes debido a otras causas, como la masa atmosférica que se mueve sobre la Tierra", indicó el decano de Geofísica de la Universidad Nacional Central de Taiwan, Benjamin Fong Chao.

A partir de cálculos elaborados mediante métodos informatizados, la NASA ha constatado que, a causa del terremoto de Chile, el eje de la Tierra se ha movido ocho centímetros y que "la duración del día se debe haber acortado 1,26 microsegundos (millonésimas de segundo)".

No es la primera vez que se detectan cambios similares tras un terremoto. El día se redujo en 6,8 microsegundos a finales de 2004 a causa del seísmo de 9,1 grados registrado cerca de Sumatra, que provocó el mayor 'tsunami' de la historia.

El efecto del patinador sobre hielo

David Kerridge, al mando del equipo de Investigación Geológica de Reino Unido en Edimburgoe British Geological Survey in Edinburgh, lo explica así: "Cuando una patinador sube sus brazos cuando está dando vueltas consigue ir a más y más velocidad. Es la misma idea: la tierra está girando y si cambia la distribución de la masa, el tiempo de rotación cambia".

Según el profesor de la Universidad de Liverpool Andreas Rietbrock, que lleva timepo estudiando la zona donde se produjo el terremoto de Chile, la Isla de Santa María, cerca de Concepción (la segunda ciudad más grande del país y una de las más dañadas por el seísmo) podría haberse elevado unos dos metros como consecuencia del temblor.

También podría ocurrir lo contrario. Según recoge la CNN, en base a estimaciones científicas, si la presa de Tres Gargantas de China se llenase, sumando 40 kilómetros cúbicos de agua, produciría, debido a su peso, un incremento en la duración del día de 0.06 microsegundos

miércoles, 31 de marzo de 2010

Los tiburones del Cretácico de Cantabria

El profesor de la Universidad de Cantabria (UC) David Didier Bermúdez Rochas ha identificado seis especies de tiburones del Cretácico en el yacimiento de fósiles de Vega de Pas (Cantabria), algunas de ellas inéditas hasta ahora en España.

Al estudiar las colecciones del Museo Geominero de Madrid correspondientes al yacimiento de Vega de Pas, Bermúdez Rochas ha localizado 51 dientes fósiles pertenecientes a especies de seis géneros diferentes de tiburones hybodontiformes hoy extinguidos.

Además, ha hallado una espina dorsal y dos espinas cefálicas, estas últimas propias de los machos de este tipo de tiburones, según ha informado hoy la Universidad de Cantabria, en un comunicado.

Las especies identificadas en este trabajo, que publica la revista 'Geobios', son 'Hybodus parvidens', 'Egertonodus basanus', 'Planohybodus ensis', 'Lonchidion breve', 'Parvodus sp.' y 'Lissodus sp.'

Cuatro de las especies descritas por Bermúdez Rochas en el yacimiento de Vega de Pas, cuya antigüedad oscila entre los 134 y los 125 millones de años, se habían encontrado con anterioridad en el sur del Reino Unido y varias de ellas no se habían hallado hasta la fecha en la Península Ibérica.

El yacimiento de Vega de Pas está formado por sedimentos depositados en un ambiente de ríos y lagos de agua dulce.

El trabajo de Bermúdez Rochas refuerza la hipótesis de otros especialistas de que este tipo de escualos tenían gran tolerancia para soportar los cambios de salinidad del agua, al igual que ocurre con algunos tiburones en la actualidad, apunta la UC.

No obstante, el autor del artículo precisa que su trabajo se ha centrado en la identificación taxonómica de los restos fósiles, "no en realizar interpretaciones paleoambientales para las cuales es necesaria la consideración de otros muchos factores".

De los dientes fósiles estudiados por Bermúdez Rochas se deduce que este tipo de tiburones estaban adaptados a una amplia variedad de hábitos alimenticios, ya que hay especies que se alimentarían de otros peces y de pequeños reptiles y otras capaces de comer organismos con concha.

jueves, 25 de marzo de 2010

Hallan un nuevo pariente del Velociraptor

Una nueva especie de dinosaurio relacionada con los velociraptor y caracterizada por tener unas garras curvadas como guadañas ha sido descubierta en la región china de Mongolia Interior, según un artículo de la revista especializada Zootaxa. 

El fósil del animal, denominadolinheraptor exquisitus, fue hallado en la formación montañosa de Wulansuhai -donde ya se han descubierto otros dinosaurios- por dos científicos estudiantes de doctorado, el británico Michael Pittman y el estadounidense Jonah Choiniere. 

El esqueleto desenterrado corresponde a un dinosaurio carnívoro de unos 2,44 metros de largo y unos 25 kilos de peso, que vivió hace 75 millones de años. Todo hace suponer que era muy ágil y que tenía una garra extremadamente curvada en cada pata que, según los expertos, le pudo haber servido para desgarrar a las presas. Pittman, del University College London, explica en la revista que su colega de la George Washington University descubrió una de estas garras sobresaliendo de la superficie rocosa. 

Cuando ambos la desenterraron y la analizaron, coincidieron en que pertenecía a un dinosaurio carnívoro. Según los científicos, el esqueleto hallado puede servir para entender mejor las características estructurales de la familia de dinosaurios a la que pertenece también el velociraptor. 

Tanto el linheraptor como el velociraptor se incluyen en el grupo de los dromesaurios, unos dinosaurios carnívoros parecidos a aves que habitaron la Tierra en el periodo Cretácico. Ellinheraptor es el quinto dromesaurio hallado en la formación de Wulansuhai.

domingo, 21 de marzo de 2010

La Tierra fue una 'bola de nieve' hace 716 millones de años

Un grupo de geólogos ha encontrado pruebas de que el hielo en la superficie del mar se extendió hasta el Ecuador hace 716,5 millones de años, confirmando las sospechas de que en aquella época la Tierra llegó a convertirse en una "bola de nieve".

Dirigido por científicos de la Universidad de Harvard, el estudio publicado en 'Science' y realizado sobre la base de un análisis de rocas antiguas tropicales que se encuentran ahora en el noroeste de Canadá, refuerza la teoría de que nuestro planeta tuvo en el pasado hielo extendido en todas sus latitudes a nivel del mar.

"Esta es la primera vez que se ha demostrado que la denominada glaciación esturtiana se produjo en latitudes tropicales, proporcionando evidencias directas de que esta glaciación en particular se convirtió en un evento que dejó a la Tierra convertida en una bola de nieve", según el autor principal Francis A. Macdonald, profesor asistente en el Departamento de la Tierra y Ciencias Planetarias en la Universidad de Harvard. "Nuestros datos también sugieren que la glaciación esturtiana tuvo una duración mínima de 5 millones de años".

La supervivencia de la vida eucariota lo largo de este período indica que la luz del sol y el agua superficial disponible en algún sitio se mantuvo en la superficie de la Tierra. Los primeros animales surgieron en la misma época, a raíz de una proliferación importante de los eucariotas, informa 'Science Daily'.

Incluso en una Tierra 'bola de nieve', afirma Macdonald, habría gradientes de temperatura en la Tierra, y es probable que el hielo podría ser dinámico: fluye, adelgaza y forma parches locales de aguas abiertas, que ofrecen refugio para la vida.

"El registro fósil indica que todos los principales grupos de eucariotas, con la posible excepción de los animales, existían antes de la glaciación esturtiana", señala Macdonald. 

Macdonald y sus colegas analizaron en Yukon (Canadá), depósitos glaciales y otros signos de glaciación, como clastos estriados, restos de hielo navegable, y la deformación de los sedimentos blandos. Los científicos fueron capaces de determinar, con base en el magnetismo y la composición de estas rocas, que hace 716,5 millones años esas rocas se encontraban en el nivel del mar en los trópicos, a una latitud de unos 10 grados.

"Debido a la alta reflectividad del hielo, el modelado del clima predice que si el hielo alguna vez se desarrolló dentro de la latitud 30 grados del Ecuador, todo el océano se congelaba con rapidez", señala Macdonald. "Así que nuestro resultado implica muy fuertemente que el hielo se han encontrado en todas las latitudes durante la glaciación esturtiana".

Los científicos no saben exactamente lo que causó esta glaciación o lo que la puso fin, pero Macdonald afirma que su edad de 716,5 millones año se acerca a la edad de una amplia provincia ígnea que se extiende más de 1,500 kilómetros desde Alaska hasta la isla de Ellesmere, en el extremo nororiental de Canadá. Esta coincidencia podría significar que la glaciación fue precipitada por la actividad volcánica.

lunes, 15 de marzo de 2010

Buscando el origen de Fobos

La sonda 'Mars Express' de la ESA ha modificado su ruta investigadora para poner el telescopio en marcha sobre 'Fobos', la luna más grande de Marte, con el objetivo de desentrañar el origen y el proceso de formación del satélite, según informó este martes la Agencia Espacial Europea (ESA).

Para ello, la ESA ha planificado una serie de sobrevuelos alrededor del cuerpo, de forma que el próximo 3 de marzo la investigación alcanzará su "punto culminante", cuando se sitúe a "tan sólo" 50 kilómetros de la superficie de 'Fobos', la distancia más cercana a la que ha estado un aparato de la luna marciana.

Así, la campaña de sobrevuelos ha comenzado el martes a las 07.52 (hora española) a 991 kilómetros del satélite. Además, estos continuarán a diferentes altitudes hasta el 26 de marzo, momento en el que 'Fobos' modifique su rango.

"'Mars Express' se encuentra en una órbita elíptica y polar con una distancia máxima de Marte de cerca de 10.000 kilómetros y pasa regularmente por 'Fobos'. Esto representa una excelente oportunidad para llevar a cabo ciencia extra", dijo el científico del proyecto Olivier Witasse.

En 2009, el equipo de la misión decidió ajustar de nuevo la órbita de la sonda espacial, desde el Centro Europeo de Operaciones Espaciales en Darmstadt (Alemania), a 50 kilómetros por encima de 'Fobos'. "Es lo más cercano que nos dejaron volar sobre el satélite", afirmó Witasse.

El origen de 'Fobos' es un misterio para los expertos. En este sentido, contemplan tres posibles escenarios: que la luna es un asteroide capturado; la segunda es que se formó 'in situ' al mismo tiempo que Marte; y la tercera, que 'Fobos' se formó a partir de restos de escombros de Marte después de que un meteorito chocara contra el planeta rojo.

viernes, 12 de marzo de 2010

La NASA lanza una sonda para desvelar los secretos del Sol


La agencia espacial estadounidense NASA ha lanzado este jueves una nueva y potente sonda solar para desvelar más secretos sobre el Sol, cuyas tormentas afectan al clima terrestre. Con la misión del 'Solar Dynamics Observatory' (SDO), los científicos esperan aprender más acerca de cómo los csampos magnéticos del Sol afectan al resto del sistema planetario.

A las 16:23 (hora peninsular española) el cohete Atlas V despegó desde la base de Cabo Cañaveral. El lanzamiento estaba previsto para el miércoles pero el fuerte viento que soplaba impidió su despegue.

El observatorio volante, el primero del programa 'Living with a Star' (viviendo con una estrella), examinará durante 24 horas al día y siete días por semana toda la actividad oscilante del Sol y con ello ayudará a entender mejor el llamado 'clima espacial'.

Cada diez segundos, el SDO capturará una imagen del astro en ocho longitudes de onda con una definición de 16 megapíxeles. El satélite vigilará además las radiaciones ultravioletas y las oscilaciones del campo magnético del Sol y obtendrá una vista del interior del astro mediante una especie de ultrasonido.

Desde la órbita terreste el SDO recopilará datos durante cinco años y descargará 1,5 terabytes diariamente, el equivalente de 500.000 canciones en un iPod, según informó Elizabeth Citrin directora del proyecto.

Un centro de recepción especial administrará la información. Para quienes dispongan de un iPhone habrá una aplicación especial a través de la cual se podrá ver el comportamiento solar en tiempo real tal como lo interpreta el flujo de datos.

Dean Pesnell, otro científico del proyecto, señaló que el proyecto es vital para calcular y predecir los fenómenos solares. Un mayor conocimiento de los cambios meteorológicos en el Sol y su efecto sobre el sistema permitirá, también estar alerta en la Tierra sobre posibles tormentas solares que podrían afectar a las redes de energía eléctrica y de comunicaciones en todo el planeta.

"El Sol afecta nuestras vidas y dependemos cada vez más de la tecnología", agregó. "Cada vez que contemplamos el campo magnético del sol, es diferente", añadió.